¿El Escultismo es feminista?
En sus orígenes, según los escritos de su fundador Baden
Powell, el Escultismo estaba destinado solo a ser practicado por chicos, pues
era un movimiento, con cierto carácter educativo y revolucionario para la época,
cuyo objetivo era formar hombres capaces de servirse a sí mismos y a la
sociedad que les rodeaba: ciudadanos útiles, según la tradición militar
anglosajona. Para ellos escribió BP su más que conocido libro “Escultismo para
Muchachos”, que junto a otros, como por ejemplo Roland Philips con su libro “El
Sistema de Patrullas”, constituyen el esqueleto central del Escultismo.
Era necesario vestir uniforme, uniforme similar al que
portaban las tropas inglesas en los territorios que tenían conquistados y bajo
su “protección”.
En aquellas épocas (principalmente en las guerras
coloniales, en la 1ª y 2ª guerras mundiales y otras) las chicas que se
acercaban a los militares tenían como cometido labores auxiliares, como por
ejemplo ejercer de enfermeras, ayudantes de cocina y similares: éllas también
portaban un uniforme adecuado a sus funciones, incluso algunas disfrutaban de
graduaciones.
Cuando los “boys scouts” comenzaren a salir a la calle,
desfilando uniformados y marcando el paso, saludando cuan militares,
acompañados de algún instrumento de percusión, a hacer salidas al campo para
vivir aventuras, a hacer campamentos, etc. las chicas, que también querían
vivir esas experiencias comenzaron a agruparse y a crear sus propios clubs de
exploradoras. De ello se dio cuenta la esposa de BP, y seguro que aleccionada
por éste creó las Muchachas Exploradoras, o bien más conocidas ahora como
Guías.
Todo ello surgió de una manera más o menos natural, que
pronto fue oficializada y estructurada en base a las ideas de sus fundadores,
acompañadas de numerosas publicaciones, que daban cobertura teórica a lo que
estaba surgiendo: aparecieron dos asociaciones claramente diferenciadas, una
para solo chicos y otra para solo chicas.
Pero ocurre que nada creado por el hombre puede ir contra
natura, puesto que el hombre y la mujer nacieron para crecer y desarrollarse
juntos, así que por muchas cortapisas y enredos el Escultismo poco a poco se
fue adaptando a las personas que lo conformaban, cosa que no fue nada fácil y
sí trabajoso.
Ahora centrándonos en nuestro país, que suponemos que no
es otro que España (aunque esto no lo tengo nada claro), el Escultismo comenzó
allá en los años 12 del siglo pasado, dirigido a solo los muchachos, tal y como
BP lo fundó. Aunque hubieron algunas excepciones, sobre todo en la época
republicana, fue regla general. Poco después se crearon las Guías de España,
como una organización similar a la de los chicos, funcionando de forma autónoma
y separada de la de los chicos, que eran los Boy Scouts Españoles o bien
Exploradores de España.
Después, como todos sabéis, llegó la suspensión (año 41,
una vez acabada la guerra incivil) y… bla, bla, bla (vosotros conocéis la
historia mejor que yo) y hasta mediados de los 60 en los que de nuevo, de una
más o menos forma clandestina, más o menos organizada, empezaron de nuevo a
salir de sus madrigueras de invierno los Exploradores, bajo los paraguas, en
muchos casos de la Iglesia (léale concordato) y con la variedad de diferentes
asociaciones cada una hija de sus respectivos “padres”.
Poco a poco se fue clarificando el paisaje y todo o mejor
la mayor parte quedó concretada en tres o cuatro asociaciones: Exploradores de
España (ANEDE, después ASDE), los Scouts Catalanes con su identidad propia y
diferentes asociaciones, los Scouts Católicos confesionales y la Asociación de
Baden Powell + otras localistas. Y por otro lado la Asociación Nacional de
Guías de España. Todo seguía igual, los chicos con los chicos y las chicas con
las chicas, según se decía en una canción del momento (que por cierto nada
tenía que ver con los exploradores y guías, porque la sociedad en general no
sabía siquiera si existían o lo que eran).
Como no podía ser de otra forma empezaron a surgir
movimientos, iniciativas, más o menos amplias, que preconizaban que el Escultismo
debería ser “mixto”, constituido por chicos y chicas, en algunos casos
comenzando por los lobatos (recordemos que la mayor parte de las Akelas y
ayudantes de Manada eran chicas), o bien por los Rovers. Poco a poco se fueron
apuntando los scouts y, después, los escultas y o pioneros.
Surgieron algunos problemas (ahora ya me centro en la
Región Murciana, que entonces era la Zona VI de ANEDE), sin demasiada entidad,
pero pienso que motivados por la aplicación del método (e incluso por la
mentalidad de la época y su concepción del escultismo), porque como antes dije
estaba solo pensado para chicos, más que por lo más natural que era que ambos
sexos, como personas, se educasen juntos y en paridad. Pero claro chirriaba
demasiado y habría que pensar el camino a seguir.
Tras muchas reuniones del Equipo de Zona y multitud de
contactos entre los Grupos que la formaban, visitas, trabajos, llegamos en
Murcia a la conclusión que deberíamos dar los pasos necesarios, tanto a nivel
de estructura como de método para llevar la coeducación al escultismo que hasta
ese momento, recordemos, era solo para chicos, admitiendo a las chicas, siempre
en un marco de respeto hacia los grupos que así lo decidiesen, sin forzar las
situaciones.
Tomada la citada decisión la planteamos, junto con otras
Zonas de España, y la llevamos a la
Asamblea General de la ANEDE. Como siempre suele pasar “la oficialidad”
dirigente no lo tomó muy a bien, ya que intentó, por todos los medios a su
alcance, que la Asamblea General no aprobara el hecho (que ya era una realidad
en variados Grupos de variadas Zonas de España) de convertir a los Exploradores
de España-Scouts de España en una asociación mixta, coeducacional, formada
tanto por hombres como por mujeres. Llegó hasta tal punto su decisión que la tarde
anterior a la Asamblea nos llevaron a un, decían, psicólogo para informarnos de
los peligros y graves dificultades que tendría para la organización scout si se
tomase el acuerdo de hacerla mixta. Mi opinión personal es que dicha
intervención en lugar de aplacar los ánimos los acrecentó y afianzó: El
Escultismo debería ser una Asociación formada por hombres y mujeres, en
igualdad de deberes y derechos.
Forzada la Asamblea a tomar una decisión al respecto
(téngase en cuenta que unidos los votos de las Zonas de Murcia, Andalucía,
Extremadura, Madrid y otras), se aprobó pese a la encarnizada oposición de
alguna otra Zona, como por ejemplo recuerdo la de Barcelona, fue aprobada la
propuesta de que la Asociación Nacional de Exploradores de España – Scouts de España
(ANEDE) fuese “mixta” en todos los sentidos y que se adaptasen los principios,
organización y reglas (POR) a esta nueva circunstancia. (Lamentablemente no
dispongo del acta de la citada Asamblea, ni de otras, pero en fin esta es la
historia).
Pero para comenzar este nuevo camino, esta nueva aventura
pedagógica que se nos presentaba, pensábamos en Murcia que habrían dos caminos:
Uno, dejar que todo fluyera de la forma más natural
posible y Dos racionalizar el proceso, sin descartar el primer camino, y
empezar a trabajar, creando equipos de scouters preparados para este fin.
En este segundo camino fue fundamental que la Asociación
de Guías de España, con su Comisaria provincial, Mercedes Hernández, esposa del
excomisario de la Zona VI Luís Molina-Niñirola, tomase la decisión de disolver
a las mencionadas Guías y propiciar que las niñas y educadoras de las mismas
pudiesen pasar a formar parte de los Grupos Scouts que hasta esas épocas eran
solo masculinos. Todo de forma totalmente voluntaria. Es un gesto que denota
los profundos conocimientos pedagógicos y sociológicos que tenía la mencionada
Mercedes, además de sentirse profundamente scout consciente de la realidad que
le había tocado vivir, con sus consiguientes cambios, supongo que alguno de
ellos muy dolorosos para ella misma, y también, cómo no, para su entregado
Equipo directivo.
Ya en la Asociación de Escultismo de la Región Murciana –
AERM, afrontamos la nueva situación por diferentes caminos, racionales y
prácticos. Uno de ellos fue la confección del llamado Proyecto Pedagógico de la
AERM, que basado en las líneas fundamentales del Método Scout y del Escultismo
en general, con el fin de adaptar esas líneas y fundamentos a la nueva
situación y retos planteados y otra la realización de diferentes cursos, unos
convocado exclusivamente para chicas, scouters tanto procedentes de las Guías
como de los Grupos scouts existentes, en el cual se le explicasen los nuevos
caminos a seguir, la pedagogía scout aplicable tanto a las chicas como a los
chicos ante la nueva situación convivencial, el tema de la coeducación, la
didáctica de la actividades a realizar y descubrimiento de las más adecuadas a
los fines y objetivos planteados en el proyecto pedagógico, etc. Y otros
dirigidos a chicos y chicas, jóvenes, en el mismo sentido que el anterior.
De ambos cursos os intercalo diferentes fotos, en alguna
de las cuales podréis observar y deducir la metodología aplicada, plenamente
scout.
Concluyo contestando a la pregunta planteada al principio
de este artículo. ¿El escultismo es feminista?
La respuesta es obvia y se deduce de lo anteriormente
escrito, el escultismo es un método educativo que nos lleva a una forma de
pensar y de vivir que preconiza el desarrollo pleno de la persona humana,
respetando las peculiaridades de cada uno de sus educandos y educadores. Por lo
que lo pueden practicar en igualdad de condiciones tanto hombres, mujeres, … No
existe un escultismo feminista, tal y como algunas asociaciones nos quieren
hacer creer, cuando se apuntan a todo lo les parezca moderno y actual, para
estar al día según “la moda de cada momento”, quizás sin reflexionar demasiado
en lo que esto significa.
No obstante, hoy día 8 de marzo de 2018 en el que acabo
de escribir este artículo, termino felicitando a todas las mujeres del mundo
mundial que contribuyen a que día a día este pueda ser un poco mejor y más
justo.
Alonso Rubio
Presidente ASRM