ANTONIO SANZ GARCÍA EN NUESTRO RECUERDO A LOS NUEVE AÑOS DE SU MUERTE.

Antonio Sanz en una pequeña convivencia en el albergue de Isla Plana.

Hoy, entre recortes de prensa, he encontrado la carta/recuerdo/homenaje que publiqué en el diario la Opinión de Murcia, el día 20 de septiembre de 2004, lunes.
Esta semana se cumplen nueve años desde que nuestro amigo y compañero Antonio Sanz García nos dejó, allá en su Cartagena, su tierra de adopción ya que era nacido en Alhama de Murcia.

CEF (Centro de Estudio y Formación) en Centro de Espiritualidad de Cartagena.

No quiero dejar pasar más días sin volver a su figura y recordar algunos datos de su vida que contribuyeron decisivamente a cambiar un poco este mundo, este mundo que nos "ha tocado disfrutar"...

CEF en el Convento de Totana.

Además de sus andanzas comprometidas en su empresa, la Bazán, intentando cambiar y mentalizar a sus compañeros para que se sintieran "sujetos de su destino" y no meros obreros asalariados y esclavos del sistema, orgulloso de su trabajo como el gran delineante que era (contribuyó a diseñar famosos barcos, como por ejemplo, el "Fortuna"), impulsor activo de movimientos obreros como por ejemplo la HOAC (Hombres de Acción Católica, que después fue un vivero de la futura CCOO), admirador de los movimientos de paz y creyente en el entorno de la "Teología de la Liberación" (admiraba, sobremanera, a Helder Cámara), practicante del famoso método "ver, reflexionar y actuar", ... , en fin y tantas actividades que sería imposible ir desgranándolas, vamos a centrarnos en su vida como SCOUT, así con mayúsculas.

Convivencia en la Perdiz, Sierra Espuña, de scouts mayores.

Su figura, olvidada en las tantas historias que sobre el escultismo regional se han escrito, se manifestó como un imprescindible impulsor y propiciador del Escultismo en nuestra Región y, más concretamente, en la zona de Cartagena.

Antonio Sanz "manteado" con silla incluida,durante la Convivencia celebrada para scouters en la Colonia de Cáritas, Sierra Espuña.

En las reuniones que durante muchísimos años desarrollamos en su casa, en su saloncito, en el barrio de San Fulgencio de Cartagena, se gestaron muchas de las actividades que a partir de los sesenta se desarrollaron en lo que entonces era la Zona VI de la ANEDE. Allí, cual fecundo vientre, emergieron grupos scouts tan fundamentales como San Fulgencio, en la parroquia del mismo nombre, y La Milagrosa. Otros se enriquecieron grandemente, como por ejemplo el Grupo de Barrio Peral, Santa Lucía, Barreros, Los Salesianos de los Dolores, etc.

Convivencia en la Perdiz, Sierra Espuña, scouts mayores, quizás la última de Antonio Sanz.

Allí se descubrieron inquietudes e ideas que se plasmaron en la celebración de muchas jornadas, congresos y convivencias scouts de todo tipo, como por ejemplo las conocidas JECS, cuyo fruto fue el intentar descubrir y definir un nuevo escultismo capaz de responder a las necesidades sociales y políticas que en esos momentos se planteaban, un escultismo que fuese "punta de lanza", renovador y cumplidor del mensaje de su fundador B.P.

CEF, creo que en la Colonia de Cáritas de Sierra Espuña.

En cuanto a cargos y responsabilidades, Antonio nunca quiso "responsabilidad" alguna, solo aceptó y lo fue durante años el cargo de Ayudante de Comisario para la zona de Cartagena, aunque nunca "escurrió el bulto"..., hasta el mismo día de su muerte estuvo obsesionado y convencido de que este mundo podía cambiar, de que era posible cambiarlo. Este fue su mensaje, ¿lograremos los scouts de ahora hacer realidad su sueño? Este es el reto que se nos plantea...
A continuación os incluyo la carta publicada en la Opinión:

Lechuza al acecho (Alonso Rubio)